Sobre mí
Facialista y masajista
Mi nombre es Cristina Caballero.
Tengo 32 años, soy mamá y de profesión esteticista.
Mi enfoque no se limita a tratamientos estéticos, sino que abarca una comprensión profunda de la belleza interior y la autoaceptación. Ofrezco a mis clientas una experiencia personalizada, donde cada tratamiento es un viaje hacia el autoconocimiento y la reconciliación con su propio cuerpo. Mi objetivo es que cada mujer que entre en En Calma se sienta escuchada, comprendida y apoyada en su camino hacia una belleza auténtica y duradera.
Conóceme mejor aquí
La mayor parte de mi experiencia profesional la he adquirido en centros de medicina estética, donde he tenido la oportunidad de devolver un poquito de autoestima a muchas mujeres que buscaban eliminar aquello con lo que no se sentían a gusto: edad, centímetros, imperfecciones…
Sin embargo, fue la otra cara de la moneda la que más me marcó y me hizo comprender los verdaderos motivos por los que tantas mujeres acudían a la clínica o a la cabina del centro. No era solo para cambiar o mejorar algo que no les gustaba. La mayoría acudían por la incapacidad que tenemos de ver lo bonito, lo bello, lo bueno que hay en nosotras.
Después de muchos años de autocrítica y desaprobación de mi cuerpo, mi piel, mis estrías, un día, gracias al nacimiento de mi primer hijo, en el peor momento a nivel físico, sentí un gran agradecimiento hacia mi cuerpo y empecé a ver cuán bello era. Al ver a esa personita tan perfecta y preciosa entre mis brazos, empecé a sospechar que si él había salido de mí, quizá algo de esa perfecta belleza había dentro de mí.
Por fin gracias a años de terapia, autoindagación y autoconocimiento y a mi pequeñajo, me reconcilié con mi cuerpo. Por fin sentí lo que era aceptarme tal y como era, sentí amor, agradecimiento y compasión por mí misma. Por fin me vi.
Después de integrar todo esto y seguir trabajando en mí, nació mi segundo hijo, y con el nació en mí una necesidad de acompañar a otras mujeres en su proceso de reconciliación con su cuerpo y su belleza. Creo firmemente que todas somos bellas, que en todas las mujeres hay una belleza real, única y apabullante. Solo necesitamos darnos el permiso de verla y vivirla.
Sólo en calma honramos el ser y la belleza auténtica.
Te invito a conocer un espacio para la belleza, el bienestar, la calma..
UN ESPACIO PARA TI